La firma nacida en Reino Unido lanza una propuesta sostenible bajo el nombre de Deadstock. Las piezas pertenecen a la colección Made In England de Dr. Martens y cuentan con una gran personalidad, estos zapatos disponibles de manera limitada son únicos ya que parten de retales y desperdicios de tejidos. La marca apuesta por maximizar el uso de los materiales con el objetivo de alcanzar un mínimo de desperdicios, y es por ello que usa cuero de diferentes orígenes y áreas.
La colección fabricada por artesanos en la fábrica de Northamptonshire destaca por una estética de retales donde el acabado es diferente en cada zapato o bota, observamos desde bordados exagerados y variaciones de colores hasta bordes sin terminar o desiguales, así como ojales hechos a mano.