Hoy se grita por una gran injusticia, la cual afecta a muchas personas y no puede ser más simple porque a su vez es muy compleja. Hablamos del NO poder expresar el amor con libertad. El NO poder besar a una persona que te gusta, que te atrae o de la que estás enamorada/o. El MIEDO a ir por la calle agarrada/o de tu pareja, el aguantar comentarios innecesarios, frases hirientes y juicios de valor. El NO poder ser padres sin miradas acusadoras, sin pensamientos de inseguridad o sin hechos que refuerzan que tu amor es menos valioso que lo normativo.
El amor es lo más bonito que existe en este mundo y nadie tiene que sufrir por ello. “La heterosexualidad no es normal, solo es lo común”, señaló Dorothy Parker y no puede ser más real. Con quién te acuestes, comparta tu vida o agarre tu mano no condiciona la persona que eres.
Hoy es el día internacional contra la Homofobia, Transfobia y Bifobia. Hoy se conmemora que dejo de ser una enfermedad mental por parte de la Organización Mundial de la Salud, dejo de ser una enfermedad el QUERER a la persona que quieras sin importar género, sexo o identidad. Hace tan solo 31 años de este cambio. Pero aún queda tanto por recorrer, tanto por escalar y superar.
Si eres de los que sufre un acoso por quién amas, recuerda que amar es lo mejor que puede pasarte y que no mereces cualquier tipo de crítica ni mucho menos acción destructiva.
Si eres de los que permite que suceda el acoso, piensa que lo normal no existe y que todos merecemos el respeto de amar. Asimismo, puedes caer en el pensamiento de que no es tu responsabilidad porque no haces nada malo… Pero sin saberlo eres tan “culpable” como el que realiza esas acciones, porque permitirlo es reforzarlo.
Y, sobre todo, si eres el que ejecuta y quién enjuicia, el no entender que el amor es de colores no te da derecho a menospreciar o faltar. La libertad de una persona termina cuando limita. No existe miedo a la homosexualidad, solo desconocimiento y falta de entendimiento, así como compresión.
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